ASÍ ESTAMOS TRANSFORMANDO EL MUNDO
Una forma ejemplar de estar en el mundo
En Tilatá hablamos del ethos desde hace varios años. Todo empezó con la pregunta de cómo dar respuesta a la necesidad de una formación ética dadas las condiciones actuales, en las que los jóvenes están cada vez más expuestos a las demandas del mercado, hay escepticismo, y abundan posturas tomadas a la ligera (muchas veces de acuerdo con intereses individuales). Sabíamos que más que un ejercicio teórico era necesario abrir espacios de conversación profunda y crítica.
Atendiendo a esta idea, se creó un equipo para reflexionar en torno al tema, con profesores, personal administrativo y estudiantes. El primer fruto de ese ejercicio fueron unos conversatorios entre estudiantes sobre las manifestaciones sociales que estaban teniendo lugar en ese momento. No se trataba de tomar posturas, sino de informarse mejor, escuchar todos los puntos de vista y aprender cuán importante es la reflexión bien informada, a través de la escucha respetuosa y abierta frente a quienes tienen puntos de vista diferentes, para la solución de los problemas sociales.
El segundo fruto, igualmente valioso, fue el de convertir la ética en un tema de conversación permanente; hacer explícito nuestro ethos, revisarlo críticamente y trabajar para desplegarlo a toda la comunidad, buscando siempre la coherencia con nuestros valores y principios. A partir de ese momento, hemos venido hablando del ethos, como nuestra forma de estar en el mundo; se genera a partir de unas creencias que hemos revisado y con las que nos sentimos a gusto, se hace visible a través de los comportamientos observables, y da frutos cada vez más evidentes en la formación de unos seres humanos distintos, que ayudan a construir una mejor sociedad. El ethos Tilatá, responde al propósito fundamental de “Transformar la educación para contribuir a una mejor versión del mundo”, es dinámico, se nutre de los cinco atributos del Colegio y nos ayuda a lograr nuestra mejor versión y la de los miembros de nuestra comunidad. Además, ha sido un motor importante en nuestra visión: el ethos Tilatá se vive cotidianamente en cada uno de los espacios del Colegio y sirve de inspiración para otros colegios de nuestro territorio.
Hoy nos alegra saber que ese camino recorrido ha ido tomando cada vez más fuerza y ver que otros colegios han incorporado el término en sus comunicaciones. Esperamos que sea el primer paso para la reflexión ética en los entornos escolares, y para fomentar posturas críticas que nutran la educación en Colombia.
María Isabel Casas Andrade